Si tu PC o portátil ha comenzado a funcionar lentamente después de actualizar a Windows 11, hay un parche disponible que debería solucionar el problema
Si has notado un descenso en el rendimiento desde la actualización a Windows 11, no eres el único. Un problema de octubre afectó a las CPUs AMD Ryzen, pero ahora son los dispositivos con un SSD incorporado los que están sufriendo.
Como informó Beta News el 8 de diciembre, las velocidades de lectura y escritura en los SSD NVMe han disminuido significativamente para muchas personas que actualizan desde Windows 10. Todo apunta a que el problema es generalizado, pero hay una solución.
De hecho, está disponible en una actualización lanzada por Microsoft el 22 de noviembre. Una de las correcciones enumeradas para el parche KB5007262 dice que "aborda un problema que afecta al rendimiento de todos los discos (NVMe, SSD, disco duro) en Windows 11 al realizar acciones innecesarias cada vez que se produce una operación de escritura". Algo conocido como el "diario NTFS USN" debe estar habilitado para que se produzcan los problemas, pero esto es siempre el caso dentro de la unidad C:.
Sin embargo, por el momento sólo está disponible como vista previa. A diferencia de las actualizaciones de seguridad mensuales habituales, eso significa que no llegará automáticamente a tu dispositivo. Pero para las personas que han notado una disminución significativa del rendimiento desde la actualización a Windows 11, vale la pena instalarla manualmente.
Cómo instalar la actualización KB5007262 de Windows 11
Afortunadamente, el proceso para instalar este parche es relativamente sencillo:- Abre la Configuración y elige 'Windows Update' en el panel izquierdo
- Haz clic en "Buscar actualizaciones".
- Si la actualización KB5007262 está disponible, espera a que se descargue e instale automáticamente
- Reinicie su dispositivo para aplicar los cambios
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